Desarrollo social y de la personalidad en la adolescencia
La adolescencia es una etapa importante de cambios en
los individuos que se ve reflejado en la interacción de estos con su entorno,
en la personalidad y donde aparece una búsqueda de identidad constante, estos
cambios tienen ciertas diferencias tanto en hombres como en mujeres.
En esta etapa aparece el autoconcepto, que es la representación
que el individuo construye de sí mismo tras evaluar su competencia en
diferentes ámbitos como habilidades interpersonales, rendimiento escolar,
deportivo, apariencia física, etc. En la adolescencia suelen diferenciarse 3
etapas: en la etapa inicial surgen los autoinformes que dan una idea, una serie
de abstracciones en la definición del YO, incrementándose las referencias a
atributos personales e intangibles, esto genera una constante comparación con los
pares y que se de mayor importancia a la opinión de los demás. En la
adolescencia media la posibilidad de comparar los distintos roles y atributos del
YO deja al descubierto los opuestos de la personalidad, por ejemplo, ser
amistoso con los amigos pero arisco con los padres, la apreciación de estos
contrastes motiva en los adolescentes cierto sentimiento de falsedad y caos en relación
a su identidad, esto hace que se agudice la preocupación del adolescente por la
opinión de los demás. En la etapa final el adolescente comenzará a integrar los
rasgos más contradictorios de su personalidad, el autoconcepto tiende a saturarse
de atributos que ya no dependen de la comparación social, por lo que las
referencias a cualidades interpersonales van dando paso a nuevos atributos
basados en criterios más personales, comprometidos con los ideales y valores del
propio individuo. De este modo, en la adolescencia final se sientan las bases
adecuadas para el desarrollo de la identidad.
También en la adolescencia encontramos la autoestima
que está íntimamente relacionada con el autoconcepto, la autoestima se define
como la evaluación global que hace el individuo de su valía como persona, los
factores que mejor predicen la valencia de este juicio son la opinión que las
otras personas tienen sobre uno, y el desempeño que uno percibe en los distintos
dominios de su vida. Se ha comprobado que el aspecto físico y la aceptación del
grupo son los dos campos que más valoran los adolescentes, superando a otros
como el comportamiento o la competencia escolar. En la adolescencia media la búsqueda
de la identidad hace al adolescente muy vulnerable a la opinión de los demás. En
la adolescencia final, es esperable que la experiencia acumulada en los
diferentes roles y una menor dependencia de los criterios externos favorezcan
una recuperación y estabilización de la autoestima.
Las relaciones familiares también se ven afectadas y
se generan una serie de cambios por la llegada a la adolescencia de un hijo, un
proceso donde el adolescente de a poco va adquiriendo más responsabilidades y
busca mayor autonomía. En ésta etapa se producen los conflictos familiares, las
principales discusiones se producen ante cuestiones cotidianas como la forma de
vestir, las tareas del hogar. Aspectos más trascendentales como sexualidad,
política o religión generan menos disputas entre padres e hijos.
Los estilos
educativos de los padres influyen en el comportamiento y personalidad de los
adolescentes, los padres con estilo educativo democrático tienen hijos que son más
maduros socialmente, competentes psicosocialmente, con mejor autoestima y más
logros académicos, por su parte, los adolescentes con padres autoritarios tienen
niveles más bajos de autoconfianza y autoestima, y muestran problemas cuando
deben guiar su comportamiento a partir de sus propias decisiones, los
adolescentes con padres permisivos confían en sí mismos, pero muestran niveles
elevados de consumo de sustancias y dificultades académicas.
Un aspecto importante en la adolescencia es la amistad,
donde chicos y chicas cada vez pasan más tiempo con sus amigos, con quienes
comparten actividades cerca y lejos del hogar, es común la formación de grupos,
generalmente con intereses en común como los deportes, la música, etc. estos
grupos pueden ejercer influencias positivas o negativas en los adolescentes. Existe
una diferencia en el modo de enfrentar la amistad en hombres como en mujeres,
mientras que ellas puntúan en autorrevelación e intimidad, ellos lo hacen en
actividades compartidas.
Otro de los aspectos que surgen durante este periodo y
cobra una especial importancia relativa para los chicos y chicas adolescentes
son las relaciones de pareja y sexuales. Efectivamente con el desarrollo
puberal aparece el deseo sexual, uno de los hitos evolutivos que deben
conseguir chicos y chicas adolescentes consiste, en ser capaces de relacionarse
con el otro género formando una relación de pareja más o menos estable. Las primeras
relaciones sexuales realmente no lo son, hacen referencia a comportamientos
masturbatorios, más frecuentes en chicos que en chicas.
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